Me levanté con entusiasmo, le ayudé a mi mamá a preparar algunas cosas para luego irse a trabajar. La mayor parte de la mañana estuve leyendo, realizando las tareas de la casa y compartí un rato con mi tía que está de visita. Por la tarde aproveché para hacer algunos trabajos de la universidad, y leer la Biblia que siempre me anima a seguir esforzándome. En el transcurso de la noche compartí un momentito con mi familia, luego escuché un mensaje muy hermoso sobre Guatemala y hablé por teléfono con algunas compañeras de la universidad.
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